"Orange?" Not bright orange. But soft. Like the sunset [Whitney]

Había sido un día bastante complicado, mas por tener que hablar con Ian, ahora si creía que nuestra relación nunca mejoraría, era un idiota... no solo el, yo también lo era por creer que cuando sus ideas cambiaran el también lo haría, pero no, ni por un milagro de Merlín creía que fuéramos a ser hermanos normales algún día... pensar en eso solo me desagradaba, aunque lo odie se que si le pasara algo mataría al responsable ademas Annette odiaba nuestras peleas y mientras mas peleáramos mas mal le hacemos a ella. Un desastre, era todo un completo desastre, y tan solo pensar en todo eso me ponía aun mas loco... debía calmarme, no quería sufrir un ataque nuevamente, no luego de lo que ocurrió con el ultimo ahora ya era una amenaza con esa maldita enfermedad ensima.
Decidí que el mejor lugar donde ir a calmarme era el Baño de Mirtle la Llorona, aunque estuviera ella molestando con sus chillidos era mejor que estar frente a miles de personas que nunca callarían, al menos Mirtle cerraría la boca si le grito y si por alguna razón pasara algo... ella era una fantasma, estaba muerta. Como suponía estaba el baño vacío, nadie visitaba ese baño por el simple hecho de que Mirtle era insoportable, a menos de que supieras como hacerla callar. Tenia la respiración algo acelerada de caminar tan rápido hasta el baño, no quería cruzarme con nadie en el camino, solo quería encerrarme en aquel baño y olvidarme de todo. Me senté en el frío y húmedo suelo del baño observando como una pequeña cabeza fantasma se asomaba por uno de los cubículos del baño. -Lárgate, no quiero verte- Digo algo agresivo y con la voz fría, solo se escucho un gritito de la fantasma -¿PORQUE NO QUIERES VERME!!?- Ya había comenzado, un grito mas y destruía el baño. Me levante de un salto mirando a la fantasma -QUE TE VAYAS! VUELVE A LA CAÑERÍA DE DONDE SALISTE!- Estaba seguro de que ese grito no solo lo oyó Mirtle... fue lo bastante fuerte como para que se escuchara fuera del baño, la fantasma se hizo hacia atrás llorando y se metió en uno de los cubículos desapareciendo dejando todo en silencio.
Al fin paz, solo un poco de silencio podía pedir, solo un poco para acomodar las ideas. Me volví a sentar y mi rostro se enterró en mis manos, solté un gran suspiro y mis manos lentamente se fueron deslizando por mi rostro hacia mi cabello echándolo hacia atrás.

Habían terminado las horas de clases y lo único que quería era comer ¿Hambrienta yo? ¡Para nada! Pasé todos los días mi infancia con un solo trozo de pan para compartir entre mi familia, pero estar en Hogwarts me había acostumbrado a comer bastante, aquí comíamos lo que se pusiera en frente de la mesa porque todo era delicioso. Salí como un rayo de transformaciones, bajé las escaleras lo más rápido que pude...ya iba por el tercer piso cuando una de éstas me jugó una mala pasada y me envió al pasillo del baño de Mirtle, debía rodear el baño para poder tomar las otras escaleras que me llevarían al Gran Comedor, y aquí es cuando mi gran oído y mi curiosidad juegan una mala pasada. Oí voces, eran bajitas y comencé a caminar más despacio para poder escuchar(Yo siempre metida en donde no me mandan). El sonido era tan leve que me sobresalté al escuchar un grito: "QUE TE VAYAS! VUELVE A LA CAÑERÍA DE DONDE SALISTE!". Venía de un chico, esa voz ya la conocía y la escuchaba bastantes veces al día, sin mencionar que tenía pesadillas con ella también(Y aquí está la mentirosa) Era un Lemacks, no tenía idea cuál de los dos gemelos. Si era Ian seguro le pegaría con lo que encontrara, pero si era Cristian estoy segura que hablaría con él...Me arriesgué y caminé hacía el baño, olvidando y dejando atrás todas mis ganas de comer. Entré al baño preguntándome si Mirtle estaría por allí discutiendo con alguno de los Lemacks, caminé por las frías baldosas y no la encontré sino que vi al Ravenclaw: Cristian, una pequeña sonrisa se asomó en mi rostro pero pude esconderla rápidamente ¿Yo sonriendo por encontrarme con Cristian? ¡Claro que no!. Me acerqué a él con sigilo, no quería molestarlo(¿Yo dije eso?) y retrocedí un poco, pero rápidamente me retracté y di la vuelta mirándolo. -¿Sabes que no deberías estar aquí?- le pregunté, el tono de mi voz que usualmente era algo sarcástico y antipático, cambió a uno dulce y comprensivo muy(Demasiado) extraño en mi -¿Estás bien?- le dije arrodillándome frente a él. Era obvio que no, si estaba aquí solo era porque quería silencio y estar tranquilo, de seguro me diría algo como: "Quiero estar solo ¿Puedes irte?". Me esperé esa y cosas peores, además yo era la que estaba allí, él ni me había llamado, nadie lo había hecho. Yo y mi infinita curiosidad, a veces quedaba como una metida, quizás ahora quedaría así también.

El silencio me relajo bastante en pocos minutos, me refregué uno de mis ojos volviendo a suspirar, debía hacer algo para evitar que me tomaran de sorpresa esos ataques, algo debía hacer, aunque no se que... de alguna manera se pueden evitar, pero como van las cosas parece algo bastante difícil de manejar. Quizá si encontraba algo que me calmara... alguna droga muggle, mi padre seguro sabia de eso, aunque dudaba que me quisiera contestar o hablar luego de lo que paso con mi madre... desde ese día ya no peleamos pero es algo peor, directamente no nos hablamos y aunque intente decirle algo me ignora... solo habla para quejarse, parece ser que cada día me vuelvo una decepción mas grande.
Estire mis pierna en el suelo y recosté mi espalda contra una de las paredes, en ese instante cerré los ojos un par de segundos hasta que escuche una voz, bien, no solo no estaba solo en el baño sino que me habían oído gritarle a un fantasma... quizá el día quería destrozarme de a poco hasta que llegue sin fuerzas hasta mi habitación. La voz me sonó familiar, y su pregunta me hizo dibujar una mueca en mi rostro... claro que lo sabia, y no me importaba con tal de conseguir algo de paz. Gire mi cabeza y vi a Whitney allí parada, me sorprendió un poco, pero tan pronto como quise levantarme e irme ella ya se había acercado y estaba acuclillada frente a mi... no quería tenerla cerca, no sabiendo de lo que era capaz, ¿Y si la lastimaba? No me perdonaría nunca eso, el tan solo pensarlo me molestaba aun mas... ¿Como podía ser tan débil? Realmente no lo comprendía, era inútil intentar entenderlo.
Su voz sonó algo dulce, no podía hacerlo, mas escuchándola así... sabia que no era de las que te hablan con cariño porque si, de echo esta era una de las pocas veces que la había escuchado así. La mire negando con la cabeza, intente abrir la boca para decir algo, pero nada salio, ni una mínima palabra, quería decirle que se fuera... pero no podía de alguna manera me calmaba que al menos alguien estuviera aquí conmigo. Espere a ver si decía algo mas, realmente no salia una palabra de mi, pero nada estaba tan callada como yo. Sonreí de lado con amargura en el rostro y baje mi mirada al suelo. -Me he visto en peores- Dije alzando un hombro como si eso le restara importancia al embrollo que tenia en la cabeza, algo de todo eso era cierto, había estado en peores... pero ya estaba cansado de las leves como de las fuertes.

Lo miré aunque no quisiera, no podía evitar mirarlo y sentirme mal por lo que él sentía, no tenía idea de que rayos sentía Cristian, pero aún así me sentía mal porque él era mi...amigo, y cuando uno quiere a un amigo hace lo imposible porque esté mejor, pero yo no podía hacer nada. Una mueca se reflejó en mi, intentaba comprenderlo aunque no pudiera, lo intenté. Negó con la cabeza y me lo esperaba, pensé en irme, quizá el no quería decírmelo porque piense que lo puedo interpretar mal o algo así, en el fondo el quería estar solo y en silencio y yo arruinaba todo eso con mi presencia, la verdad siempre arruinaba muchas cosas que no me importaba si las echaba a perder, pero ahora se trataba de Cristian, y aunque no quisiera admitirlo, lo quería, debía hacer algo, cualquier cosa, aún así quedara como boba delante del colegio lo haría, lo que sea. "Me he visto en peores" sonreí un poco ante sus palabras, quizás era cierto, quizás no, no lo sabía, tal vez era por su hermano: Ian, él era un tonto, Annette y Cristian me caían bien, eran parecidos, pero Ian, él era como el inadaptado, que solo sabe molestar. Cristian no se parecía en nada a él, en nada, excepto en su apariencia claro, pero aún así era imposible confundirlos -No quiero que estés así- le dije finalmente esperando que mis inútiles palabras ayudarán en algo, le sonreí dulcemente(Estás cosas, solo las hacía por él) tomé su mano como queriendo decirle que aquí estaba yo, y que siempre lo iba a estar para él -Anda, dime... ¿Porqué estás así?- pregunté -Si es por tú hermano, te juro que lo golpeo- reí un poco al finalizar. Y de seguro lo haría, nadie podía hacer que mis amigos se sintieran mal aunque fueran de su familia.

Note como mi estado se pasaba a ella, odiaba poner a las personas tristes, por lo general preferia hacerlas sonreir, pero dudaba poder hacer eso en este momento... hoy realmente no era mi dia, no lo era. No sabia que hacer, que decir, podria levantarme e irme... pero eso seria muy raro, creeria que estoy loco o a lo mejor que no la soportaba y la verdad era que no me soportaba a mi mismo. Me lleve las piernas cerca del pecho apollando mi barbilla en una de mis rodillas miando a Whit unos segundos, realmente no sabia que decirle, solo queria silencio, pero ella me hacia bien estando allí, al menos no estaba solo. Sonreí de lado al mismo tiempo que ella lo hizo, no sabia bien porque lo había echo ya que la situación no daba para que sonriera pero era imposible no lograr sacarme una sonrisa, si en algún momento no sonriera, seria realmente un muy mal momento. Escuche lo que dijo "No quiero que estés así" yo realmente tampoco quería estarlo, pero me sorprendía que ella tampoco lo quisiera... digo, sabia que Whitney no era de las personas que les preocupara lo que a los otros le pasara, o al menos no se dejaría afectar por cosas de otros, en ese aspecto la envidiaba... ojala pudiera tener su habilidad de que las cosas no te afectaran tanto. Me relamí mi labio superior y suspire levemente. -Créeme, yo tampoco quiero estar así, no soy tan fuerte como tu supongo- Digo mordiendo mi labio inferior y formando una pequeña sonrisa que se desvanece rápidamente. Contarle lo que me pasaba... eso seria un reto, y terminaría nunca si me pusiera a contar todo, era mejor resumir las cosas, ademas no quería hablar mas del tema cada vez que lo hacia recordaba todo y eso no me gustaba. -Es largo, pesado, te aburriré... no te preocupes ya se me pasara, es cuestión de tiempo- Digo fingiendo despreocupación para que cambiara la cara por una mas alegre y no pude evitar reír levemente por lo que dijo.- No, no es Ian... es mi culpa, yo soy el tonto, no debería meterme con sus juegos- Comento ladeando la cabeza en negativa, no sabia si llamarlo juegos realmente a lo que hacia Ian, pero por ahora esa era la única palabra para describir nuestras peleas con Ian.

No entendía porque me ponía triste verlo así, Cristian solo era un buen amigo nada más o bueno quizás eso quiero pensar ¡Ay por favor! Que clase pensamientos se me vienen a la mente en un momento como este, debo estar loca. Vi como cambiaba de posición, me levanté y arreglé mi túnica, solía hacer este gesto cuando no tenía idea que decir y este era el momento en que ninguna palabra inteligente cruzaba por mi mente, quería decirle algo, alentarlo, decirle que yo estaba aquí para él, pero no salía de mi boca ninguna palabra... Lo miré, creí que era la única forma de ayudarlo, lo que no sabía es que me dolería mucho verlo con aquella mirada, me dolía de verdad, un nudo se formó en mi garganta de inmediato ¿Es posible que vaya a llorar?¿Por él? No lloraba ni por mis calificaciones... Y por un momento se me cruzó por la mente que quizás lo quería como un hermano, o algo así. Escuché como decía que no era tan fuerte como yo y decidí no derramar ninguna lágrima, no por ahora. Intentó sonreír y eso me puso peor, quizás todo esto era una broma para ver hasta donde llegaba mi frialdad...No, Cristian no es así ¿Y si tal vez es Ian? -¿Comprendes que no puedo verte así?- Solté y me tapé la boca enseguida, yo no era la que había dicho eso... No era yo de ninguna manera, Whitney no se preocupaba de los demás(A excepción de su familia) Y sus mejores amigos, pero Cristian solo era un buen amigo y nada más... Rió un poco, por lo menos ya no tenía tanta pena en su mirada, sonreí. -Nadie debería meterse en sus juegos, es un imbécil y además todo se devuelve, ya veremos cuando él esté mal.- Dije para alentarlo un poco, nadie debería y él tampoco tendría porque meterse con nosotros, lo detestaba, era una persona horrible y algún día terminaría solo y sin nadie que lo quisiera, porque se lo merecía. Abracé a Cristian como un acto espontaneo, quizás el aire del baño me estaba afectando, o tal vez estaba bajo la maldición Imperius... Porque yo jamás haría esto, aunque ahora por él si lo estaba haciendo, puede ser que me estaba volviendo una mejor persona...No lo sé, pero solo disfruté el momento en que estuve abrazada de él, lo solté y le sonreí.

Estaba algo confundido por lo que pasaba, bueno... Whit era una buena amiga sabia que podía confiar en ella en lo que sea, de echo a veces la "usaba" como consejera, o mas bien la obligaba ya que cuando comenzaba a hablar pocos podían detenerme realmente ella solo se sentaba a escuchar y aunque sabia que no le importaba mucho o la estaba aburriendo yo seguía hablando, me gustaba hablar con ella aunque ella no dijera una sola palabra al menos me escuchaba, o al menos eso creía, estaba seguro de que sabia mas cosas de Ian y yo que cualquier otra persona ya que casualmente siempre terminábamos tocando ese tema y yo contándole lo insoportable que era ser hermano de Ian.
Pero ahora era diferente, la notaba diferente, era como si realmente le afectara verme así... algo raro ya que estaba acostumbrado a verla seria, o mirando a otro lado pensando en sus cosas, pero ahora realmente la veía apenada o al menos eso parecía a menos de que este fingiendo interesarle... no, seguro que no, quería creer que le importaba, siempre sentí una atracción hacia Whit... así era desde que la conocí, viéndola en la cena de principio de mi tercer curso en Hogwarts, había encontrado su mirada por un par de segundos de mi mesa a la mesa de Gryffindor, no tarde mucho en hacerme su amigo, aunque la timidez me mataba un día logre hablarle, claro después de un año temiendo que en mi cuarto curso ella no volviera a Hogwarts, planificando en mis vacaciones como haría para hablarle, para al menos captar su atención unos minutos y que supiera que estaba allí. Pero no fue mas que eso, ella era una chica seria, pero su voz podía calmarme por mas fría que sonara, podía quedarme horas viéndola desayunar si no fuera porque se levantaba para ir a sus clases... claro, ella nunca supo que me gustaba, nunca había sido lo suficientemente valiente como para decirle, y por eso estoy en Ravenclaw y no en Gryffindor, si poseía valentía dentro de mi quizá nunca la había sacado fuera. Quizá seria incapaz algún día de decirle lo que realmente sentía, o no... pero ella era muy dura y no era el único fijándome en ella, lo sabia, que chances podría tener yo habiendo tantos a quien podría elegir.

Al menos ya me había concentrado en otra cosa ademas de todos mis problemas... era también un problema, pero prefería pensar en ese antes que todos los otros que tenia con Ian y los ataques que tenia muy seguido, quizá algún día seria capaz de controlarlos... quizá no, y seguiría siendo la misma amenaza de siempre, otro impedimento en acercarme a Whit, ¿Y si en mis ataques las lastimaba? Era capaz, si lo había echo con mi madre era seguro que podría lastimar a Whit en algun ataque de ira, y si lo hacia realmente nunca podría perdonármelo. Escuchar lo que me dijo me extraño aun mas... ¿No podía verme asi? ¿Lo diría enserio o solo para que dejara de parecer un idiota triste? Parecía ser algo que no quiso decir, por la menear que reacciono luego, pero no... esa no era Whit, estaba seguro de que lo haría para que dejara de parecer un tonto sentado en el baño. La mire soltando un suspiro -Si puedes, ¿Parezco un idiota, verdad? Aqui sentado, huyedole a los problemas en lugar de enfrentarlos, siendo cada vez mas patético, mas incompetente, dejándome afectar por mi hermano, por mi padre, huyendo de mi madre, alejándome de mi hermana por miedo a lastimarla, incapaz de decir...- Dije cayendo en la cuenta de que iba a confersarlo... no, no lo haría, no quedaría aun mas patético de lo que ya estaba, ya era suficiente con eso, una confesión mas y realmente terminaría siendo el hazme reír de todo Hogwarts. Calle de inmediato viendo al suelo y ladee mi cabeza levemente -Mi padre tenia razón, debería alejarme de la familia antes de que acabe peor- Murmure para mi mismo mas que para Whitney, junte mis manos entrelazando los dedos y mi mirada se dirigió al techo ¿Que haría si los dejara? Por mas de querer proteger a Anne de mi mismo, quería saber si estaba bien, ¿Como lo haría escapando? Confiaba en que Ian la mantendría a salvo, era una de las cosas en la que nos parecíamos, ninguno de los dos dejaría que algo le pasara a Anne... supongo que me quedaría confiar en Ian, ¿Pero si fallaba? ¿Si volvía a sus andanzas de Mortifago? Annette quedaría desprotegida, mi madre era bruja, pero no podría llegar muy lejos en proteger a Anne, no era que no confiara en mi madre pero con los años ella se fue acostumbrando mas a lo muggle que a lo mágico y mi padre era un simple Muggle... ellos no podrían hacer nada en una situación de peligro aunque quisieran, todo quedaba en manos mías y de Ian, pero si Ian cambiaba de bando entonces ¿Que seria de Annie? No podía permitirme que estuviera en peligro.

En parte las palabras de Whit me reconfortaron, pero por otra parte sabia que no toda la culpa era de Ian, el idiota aquí era yo, el que no podía controlarse, la amenaza, Ian solo discutía como siempre pero el no agredía a la gente porque si ese era yo, por lo débil... me decepcionaba hasta mi mismo. -Quizá tengas razón, aunque el verdadero tonto soy yo...- Dije negando con la cabeza y la mire frunciendo el ceño -¿Sabes...? No tengo ganas de hablar de Ian... ya estoy cansado, tuve demasiado Ian por hoy. Cuéntame algo... cualquier cosa, necesito escuchar tu voz- Dije con una mueca, ¿Enserio lo había dicho? En fin, ya lo había echo... ya daba igual, con solo escucharla me bastaba, podría calmarme un poco, distraerme con algo, aunque dudaba que fuera a decir algo, mas luego de lo que le había dicho.

Lo miré y lo que siempre quise negar esta vez no podía, él era la perfección, sus ojos, su cabello, todo era maravilloso, y yo... yo la idiota ¿Hasta ahora me venía dando cuenta? Desde que lo conocí nunca lo había notado. Lo había visto un par de veces frente a mi mesa y en los pasillos, pero jamás le quise hablar... simplemente no tenía la ganas de hacerlo, hasta que un día él fue quién me hablo y desde allí somos muy buenos amigos, pero ahora, en este año comenzaba a sentir algo más ¿Sería posible? ... Jamás había sentido nada por nadie, a excepción de mi familia, claro, ello lo son todo para mi. ¿Cristian? ¿Enserio? Quizá fui muy tonta o despistada para darme cuenta de lo que en verdad sentía, además, existen tantas chicas guapas en el colegio que sería una casualidad que se fijara en mi ¿Qué cualidades tendría yo? Lo único que sabía hacer bien era ignorar a la gente y mantenerme seria, era lo único capaz de hacer, y eso no era algo que atraiga a los chicos, porque si alguien se quedaría sola por el resto de su vida, sería yo, Whitney, la solterona.

¿Qué rayos estaba sucediendo conmigo? Si no me controlaba, tendría otros de esos ataques repentinos de querer ayudar a los demás. Era bastante increíble que dijera lo que sentía, porque muchas veces prefería guardarme las cosas y sufrir sola. No me gustaba parecer débil ante nadie, pero ahora, le había dicho a él que no podía verlo así y era todo cierto, no era yo la que decía eso, aunque era lo que sentía. Me dolía verlo así, triste, cansado, decepcionado por tonterías y si no tenían solución, ambos podríamos ver como solucionarlo, solo que él no quería decírmelo aún - Créeme que no puedo ¿Idiota? Oh, estás muy equivocado. No sabes cuanto daría por poder expresar lo que siento, como tú, en este momento. No les hagas caso, sé que es difícil porque es tu familia, pero ellos deberían estar allí para apoyarte no para que te molesten. Tu madre y tu hermana... estoy segura que ellas comprenderían todo, Cristian... ¿Incapaz de decir? - pregunté, aunque al momento desee no haber dicho nada, quizás era algo que no quería decir, debería haberlo dejado pasar y ya. Pero yo y mi infinita curiosidad jugaban en contra otra vez ¿Tu padre dijo eso? - sí tenías un padre así para qué quieres enemigos, digo, no sé como será que un padre te diga que debes alejarte de la familia, el mío jamás me había dicho eso y nunca lo haría tampoco, creo - Jamás había dicho esto, pero si necesitas un lugar donde estar si pasa algo grave dentro de tu familia, las puertas de mi casa están totalmente abiertas para ti, Cristian. - le ofrecí sabiendo que estuviera la posibilidad de que el no aceptaría porque él haría lo que fuera por proteger a su hermana, y estando fuera de su casa, en una casa llena de muggles no podría hacer mucho y el no permitiría que nada le pasara a ella, era como yo con mi hermana Prim, era tan delicada que cualquier cosa le afecta y yo siempre esta allí para ayudarla. Supongo que es el precio de ser hermanos mayores.

¿Enserio Cristian creía que él era un tono? Estaba bastante equivocado, todo lo que él decía, hacía que me sintiera aún peor, porque sé que a él le dolía muchísimo más que a mi - No eres un tonto y deberías tenerlo muy claro - le dije subiendo el tono de mi voz, él tenía que saberlo, era mucho más inteligente que la mayoría de los alumnos de Hogwarts, incluyendo a su hermano. Me sorprendí mientras él me pedía que le contara algo ¿Qué quería que le contara? Que estaba creyendo que lo que sentía por él era algo más que una simple amistad, creo que no lo haría, quizás por esas casualidades se me saldría, era tan estúpida que cualquier cosa podría pasar -
No tengo nada que contar...- lo miré y era como una puñalada verlo de esa forma, así que puse todo mi empeño para recordar alguna anécdota, lo que sea para distraerlo - Bueno... eh, mi padre tendrá que viajar a Latino américa por su trabajo, ya sabes, trabaja en el ring - me avergonzaba un poco de que mi padre sea un luchador, la mayoría de los padres eran empresarios o por lo menos vendedores, algo así, pero el mío no, tenía que ser la excepción, claro, a veces me molestaba ser hija de muggles.